La Policía Nacional ha detenido a 69 personas, mientras otras 25 están en investigación, por pertenecer a un entramado que bloqueaba el sistema de citas online de extranjería mediante un 'bot' informático con el que conseguían las citas disponibles para luego revenderlas, pese a que es un trámite gratuito. Las detenciones se han realizado en Toledo, Albacete, Madrid, Alicante, Almería, Badajoz, Barcelona, Vizcaya, Burgos, Cádiz, Córdoba, Baleares, Marbella, Murcia, Tarragona, Tenerife y Valencia.
"Los arrestados son considerados presuntos responsables de los delitos de pertenencia a organización criminal y daños informáticos, en una investigación que ha permitido identificar a 94 personas". Así lo ha dado a conocer este viernes la Policía, que ha detallado que las personas extranjeras que querían pedir citas se veían obligados muchas veces a recurrir a alternativas, incluso a contactar con los propietarios o intermediarios de los 'bot' que les chantajeaban y cobraban entre 30 y 200 euros.
Detalles de la investigación
Coordinada por la Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF), las pesquisas arrancaron con una investigación de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Valencia que pasó al Juzgado de Instrucción 8 de Valencia, a raíz de un informe técnico de la Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Comisaría General de Policía Judicial.
A partir de este informe se pudo desbloquear una serie de investigaciones de varias Brigadas Provinciales de Extranjería de España relacionadas con los problemas que manifestaban algunas personas extranjeras en España para acceder al sistema de cita previa. La investigación llevó hasta una red criminal que utilizaba un 'bot' informático, que mediante tareas repetitivas, predefinidas y automatizadas obtenían la práctica totalidad de las citas personales disponibles, que son "imprescindibles" para presentar trámites obligatorios de extranjería en todo el país.
El 'bot' hacía el sistema inaccesible para los usuarios, por lo que interrumpía de esta manera el normal acceso a un servicio público gratuito, que presta precisamente la Policía Nacional como cuerpo policial competente para la realización de trámites de extranjería.
El 'bot' informático desarrollado por la organización criminal tenía la capacidad de evitar los mecanismos de seguridad instalados en la página web donde se realiza la solicitud de citas online, siendo capaz de librar los llamados 'captcha', destinados a detectar la presencia de este tipo de programas informáticos.
En una primera fase de la investigación se realizaron distintas tomas de declaración, análisis económico-patrimoniales de sociedades y otras indagaciones que concluyeron con una primera operación policial en la que se practicaron cuatro entradas y registros. Los agentes detuvieron a los cuatro principales integrantes de la organización en Barcelona y Valencia. Asimismo, intervinieron gran cantidad de efectos informáticos, diversa documentación y un total de 206.950 euros en efectivo.
Después de estos primeros arrestos se llevó a cabo una investigación económica en torno a los principales investigados, así como de la empresa utilizada para suministrar servicios de alquiler del 'bot' para la venta de citas de extranjería.
Además, se llevó a cabo un análisis de la documentación intervenida en los registros y otras pesquisas que permitieron detectar a un grupo de personas que actuaban como intermediarios, en connivencia con los principales investigados detenidos.
Una vez alquilado el 'bot', los arrestados lo empleaban de forma ininterrumpida sobre el sistema informático de citas online, introduciendo o transmitiendo datos, perjudicando así el normal y correcto funcionamiento de la web de gestión de citas.
Y tras el estudio económico, se pudo identificar que todas las transacciones estaban mencionadas en su concepto como "alquiler robot". Incluso se tuvo conocimiento de que los intermediarios habían recibido grandes cantidades de dinero en concepto de ingresos por la venta de citas de extranjería, provenientes de personas que querían solicitar asilo, a las que no les quedaba más remedio que pagar por lograr una cita que "es gratuita".
Los intermediarios eran abogados, gestores, asesores y otros conseguidores con los que trabajaba la referida empresa. Para la Policía, eran conocedores y conscientes de la existencia de un daño informático contra la web oficial de citas y del perjuicio que con sus actos provocaban a los extranjeros que, en muchas ocasiones, se encontraban en una situación de gran vulnerabilidad y desesperación.
El 'bot' detectaba el momento en el que se liberaban citas en las diferentes provincias y las conseguía al tener precargados los datos y estar programado las 24 horas al día controlando la liberación de citas.