La licitación del Ayuntamiento de Toledo para instalar una carpa desmontable en una parcela de la Peraleda de cara a ofrecer una alternativa más de ocio nocturno en este espacio ha quedado desierta.
Ninguna empresa ha presentado su solicitud para explotar este espacio público, de unos 1.700 m2, por un montante de 22.500 euros para una temporada de seis meses -prorrogable por otra más-, tal y como se establece en el orden del día que va a debatir este martes la Junta de Gobierno Local.
Esta iniciativa no contaba con la aprobación de la Asociación de Hostelería y Turismo de Toledo (AHT), que el pasado 28 de junio presentó un recurso de reposición contra el acuerdo por el que se aprobó el inicio del expediente de contratación para la instalación de la mencionada carpa cubierta en la Peraleda.
En concreto, la superficie de este carpa, con la que el equipo de Gobierno de PP y Vox intenta dar respuesta a la demanda juvenil de ocio nocturno, puede ser de hasta 1.200 m2 y tendrá que establecerse un espacio libre de un máximo de 400 m2 para la instalación de aseos químicos.
Su licitación y la no apertura de una de las dos terrazas que se instalaron el verano pasado -Summerland- ha generado polémica y críticas entre la juventud toledana y también entre la oposición. Tampoco la AHT comprendía "qué obstáculos existen" para no abrir dicha terraza pese a ubicarse en los terrenos cedidos por el Consistorio a la Guardia Civil para construir el cuartel, ya que esta situación también se daba el pasado verano.
Además, el PSOE acusó al alcalde, Carlos Velázquez, de sacar a concurso público la instalación de esta carpa para "montar “u chiringuito y favorecer a los que le ayudaron en campaña electoral y montan las fiestas de su partido", según trasladó el viceportavoz del Grupo Socialista Municipal, Pablo García.