La Guardia Civil ha detenido a tres hombres con edades comprendidas entre los 30 y los 36 años, como presuntos integrantes de un grupo criminal y presuntos autores de 28 delitos contra el patrimonio, entre ellos hurtos en centros religiosos, robos en establecimientos comerciales o sustracción de vehículos.
Los hechos fueron cometidos en las localidades de Las Ventas de Retamosa y Casarrubios del Monte en Toledo, en las localidades madrileñas de Fuenlabrada, Móstoles, Alcorcón y Arroyomolinos, y en los barrios de Carabanchel y Batán de Madrid capital. Se han recuperado siete vehículos que habían sido sustraídos pudiendo entregar seis de ellos a sus legítimos propietarios, ya que uno de ellos lo calcinaron, según ha informado en nota de prensa el instituto armado.
El pasado mes de octubre, el Área de Investigación de la Guardia Civil de Valmojado inició la Operación CAMTACAR para lograr detener a los responsables de un delito de sustracción de vehículo cometido en la localidad de Las Ventas de Retamosa. Además, la víctima de este hecho informó a los agentes que después de que se produjera el robo, su entidad bancaria le había informado que se habían realizado varias transacciones con una tarjeta de crédito que había en el interior de su coche.
Investigación
Durante la investigación, los agentes comprobaron que eran varios los delincuentes que habían participado en la sustracción del vehículo y que hacían uso de él circulando próximamente al municipio de Las Ventas de Retamosa, lugar del robo, por lo que confirmaron que podrían estar establecidos en una vivienda de esa zona.
Gracias a la colaboración de la Policía Local de Las Ventas de Retamosa, se averiguó que eran tres los integrantes de este grupo criminal y que estaban relacionadas con la autoría de al menos otro delito más, un robo con fuerza en las cosas cometido en una estación de servicio de este municipio pocos días después del robo del vehículo.
Al poco tiempo, los agentes constataron que su actividad delincuencial era muy activa, variada y se centraba en las provincias de Toledo y Madrid.
En varias ocasiones estos delincuentes, al ser detectados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, protagonizaron varias huidas a gran velocidad en dirección Madrid, poniendo en grave riesgo la integridad del resto de los usuarios de la vía.
Casi 30 delitos contra el patrimonio
Como continuación de esta investigación, los agentes comprobaron que también eran los responsables, entre otros, de varios delitos de hurto cometidos en centros religiosos del barrio de Batán en Madrid y de Alcorcón, del robo de las taquillas de un gimnasio de Arroyomolinos, y de una guardería en Alcorcón. En estos lugares los delincuentes sustraían bolsos o mochilas con documentación y objetos de valor, además de las llaves de los vehículos que luego robaban para cometer nuevos delitos.
Los efectos de valor que obtenían de la comisión de los robos no los guardaban en ningún domicilio, sino que lo trasladaban inmediatamente a la zona de la Cañada Real Galiana de Madrid para darle rápida salida.
Además de los hurtos y los robos, los delincuentes utilizaban la documentación sustraída de distintas personas para cometer estafas en estaciones de servicio, donde entregaban una tarjeta bancaria al encargado a fin de que habilitase el surtidor de combustible para repostar, huyendo rápidamente del lugar tras conseguir llenar el depósito.
Una vez analizada toda la información, obtenida su identidad y localizada la vivienda donde estaban establecidos, la Guardia Civil montó un dispositivo en una de las calles de la localidad de Camarena, donde se les interceptó y detuvo cuando volvían a su domicilio procedentes de cometer varios robos en el interior de vehículos estacionados en un aparcamiento de Renfe de la localidad de Fuenlabrada, lugar donde se recuperó otro vehículo sustraído.
Tras la detención de estos tres hombres de nacionalidad española, los agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Valmojado han podido esclarecer, además del delito de pertenencia a grupo criminal, 28 delitos contra el patrimonio cometido en localidades de las provincias de Toledo y Madrid, logrando recuperar seis vehículos sustraídos que fueron entregados a sus legítimos propietarios, además de un séptimo que fue calcinado por los delincuentes.
Los detenidos y las diligencias instruidas fueron entregados en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción correspondiente de Guardia de Torrijos.