El Gobierno de España sigue sin dar fechas para la exhumación de la cripta del Alcázar de Toledo en la que se encuentran, entre otros los militares franquistas José Moscardó Ituarte y Jaime Milans del Bosch y Ussía.
Fue el pasado octubre cuando Carles Mulet, senador autonómico designado por las Corts Valencianes y miembro del Grupo Parlamentario de Izquierda Confederal (Més per Mallorca, Más Madrid, Compromís, Geroa Bai y Agrupación Socialista Gomera), preguntó por las medidas a adoptar “para eliminar los elementos fascistas, con enterramientos de militares franquistas presentes en la cripta del Alcázar de Toledo” y cumplir así con la recién aprobada Ley de Memoria Democrática.
La respuesta del Gobierno de España a la pregunta del senador se producía el 1 de diciembre y se remite a la creación de un Comité de Seguimiento que vele por el cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática.
En concreto señala que “se ha procedido a la aprobación de la Orden Ministerial 57/2022, de 28 de octubre, por la que se crea el Comité de Seguimiento, para el estudio, la coordinación y la planificación de las actuaciones que se deriven de la Ley 20/2022, de 19 de octubre, de Memoria Democrática” y que, además, se garantiza “en todo momento que las decisiones adoptadas siguen el procedimiento adecuado y gozan de un marco de plena seguridad jurídica”.
Hay que recordar que Izquierda Unida también estudia un requerimiento judicial para sacar del Alcázar de Toledo a Moscardó y Milans del Bosch.
El Ministerio de Defensa, titular Alcázar de Toledo que alberga el Museo Nacional del Ejército y la Biblioteca de Castilla-La Mancha, confirmaba el pasado mes de noviembre a elDiario.es que había iniciado el proceso para la exhumación, de forma similar a la del general golpista Queipo de Llano de la Basílica de la Macarena de Sevilla o a la futura exhumación de José Antonio Primo de Rivera en el Valle de Cuelgamuros, pero en el caso de Toledo avisaba que se tardará porque “no se puede ir tan deprisa”.
Días después, el secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez, de visita en Ciudad Real evitaba también dar plazos. Una posterior visita de la ministra Margarita Robles a la Academia de Infantería toledana no dejó nuevas pistas ya que la titular de Defensa no hizo ninguna ese día declaración a los medios de comunicación que habían sido citados para conocer el programa de formación a soldados ucranianos que se realiza en esta instalación militar.
Una pancarta de 14 metros para homenajear a Moscardó
No ha sido la única pregunta realizada por Mulet en los últimos meses. El senador valenciano también se interesó el pasado octubre por el homenaje que el grupo de ultras del equipo de fútbol italiano SS Lazio realizó ese mes al general Moscardó desplegando una pancarta en el patio del Alcázar de Toledo.
La pancarta decía “Honor al general Moscardó” y, según relata Mulet “con ella los fascistas italianos recordaban la figura del militar al cargo de la fortaleza durante su asedio en la Guerra Civil”.
¡Honor a Ultras Lazio! pic.twitter.com/deNd7hr9h4
— Dirdam™ (@Dirdam2) July 2, 2022
“Hasta siete miembros del grupo Ultras Lazio, la rama más radical de los aficionados del equipo romano, desplegaron la enorme pancarta en el centro del patio del Alcázar “sin que nadie del personal de seguridad se lo impidiera, pudiendo llegar a fotografiar el momento y compartirlo en sus redes sociales”, recordaba. Habían introducido la pancarta, de más de 14 metros de
“El SS Lazio fue el equipo del dictador Benito Mussolini, y su grada de animación siempre ha estado vinculada a las ideas fascistas”, incide el senador quien recordaba que “la fama del general Moscardó como héroe fascista llegó a tal punto que Hitler se empeñó en conocerlo en persona, siendo el invitado estrella de la fiesta de su 50 cumpleaños, el 20 de abril de 1939 en Berlín”.
No era la primera vez que el senador dirigía una pregunta en este sentido al Gobierno de España que mantiene los restos de los militares golpistas en un espacio público, remarcando que se trata de una forma de “humillación” a las víctimas del franquismo. “No sabemos si es por la afinidad ideológica de la ministra de Defensa con el franquismo o por pura cobardía, pero es insostenible esta situación, que produce náuseas y permite actos como el descrito”, decía Carles Mulet al preguntar por el motivo de no sacar “los restos del asesino Moscardó de la cripta del Alcázar de Toledo” para depositarlos “en un vertedero de tóxicos peligrosos”.
La respuesta del Gobierno de España es la misma y se remite a la actuación del Comité de Seguimiento del cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática. La respuesta la reproduce el Ejecutivo central en una tercera respuesta a la pregunta: “¿Qué va a hacer ahora el Gobierno, en concreto, para desnazificar el Tercio duque de Alba?”.
Se refiere a una unidad de la Legión que “presume de la ‘toma de Badajoz’, uno de los crímenes más atroces del franquismo. El Tercio 'duque de Alba', con sede en Ceuta, reivindica el papel de sus antecesores en el asalto franquista de la ciudad, que estuvo seguido de miles de asesinatos de republicanos, comentaba Mulet en su pregunta.