Ha sido una declaración institucional con una medida puesta en escena. Emiliano García-Page ha comparecido en el Palacio de Fuensalida de Toledo, sede de la Presidencia de Castilla-La Mancha, en el lugar reservado para grandes ocasiones. Ha sido en el claustro palaciego donde se han vivido desde distintas tomas de posesión del Gobierno regional, la recepción de figuras relevantes o la presentación de acuerdos importantes.
El presidente castellanomanchego se presentaba además con una rosa roja en la mano. El símbolo del PSOE - la rosa y el puño- en estado puro. Y ha posado para los fotógrafos y las cámaras de las televisiones que, en el algunos casos, emitían en directo.
Quizá era una forma de reivindicar que sigue siendo socialista frente a las críticas o a las peticiones que le llegan desde hace meses para que “rompa el carné del PSOE”. Ha dicho que espera un nuevo vapuleo de las redes sociales por oponerse a que el PSOE firme un acuerdo con ERC que permita investir a Salvador Illa, pero también que Catalunya reciba una financiación singular, similar a la que ya reciben Euskadi o Navarra, como territorios históricos de España. Y no le importa.
“Me dirán que soy facha o de derechas pero lo que plantea ERC es una fábrica de alimentar a la extrema derecha en España”. También ha dicho no estar “en disposición de dar lecciones a nadie” pero también aseguraba: “No voy a pedir perdón por no estar cambiando constantemente de opinión. Si piensan que me ofenden se están equivocando”, mientras exhibía la rosa roja sobre el atril.
“No me vincula”, decía, lo que ayer aprobó la Ejecutiva Federal del PSOE. “Combato el simple hecho de que en mi partido se esté planteando este ataque contra la igualdad”. Y de nuevo la rosa roja. En la mano y en el atril.
“Les hablo desde la perspectiva muy personal. Procedo de una familia enormemente humilde y que nadie piense que es demagogia. He podido llegar a donde estoy gracias a las políticas de redistribución de riqueza, gracias a la política fiscal de este país en el que pagan más los que más tienen” y ha dicho ser “una persona agradecida a la universalización de la educación, la sanidad y a las becas de Felipe González que no han conocido parangón en España ni, probablemente, en países del entorno”.
El Gobierno de Page aprueba interponer un recurso de inconstitucionalidad contra la ley de Amnistía