El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado que el Gobierno regional se va a personar en todos y cada uno de los recursos que se interpongan desde Murcia y la Comunitat Valenciana contra el nuevo Plan Hidrológico del Tajo, aprobado el pasado 24 de enero por el Consejo de Ministros, y que incluye caudal ecológico para el río sin condiciones.
“Ese acuerdo conseguido nos lo van a intentar tumbar en los tribunales; hay esa intención”, ha advertido el presidente, quien ha reiterado su disposición a seguir defendiendo, así, el acuerdo alcanzado. “Lo que se consigue hay que consolidarlo, porque luego pueden venir malos tiempos”, ha subrayado.
En esta misma línea, ha rechazado que siga existiendo “la tentación de enfrentarnos una parte de la España seca contra otra, si las dos somos España seca” y ha confesado que le duele que haya quien crea que “queremos quitarle el agua al Levante”. Lejos de ello, ha proseguido, la intención es poder generar las condiciones necesarias para que también Castilla-La Mancha se vea beneficiada del desarrollo que permite el acceso el agua.
Así, ha valorado que “por cada hectárea de regadío que tenemos aquí, y el regadío produce tres veces más que el secano, en los sitios donde mandamos el agua hay cuatro”. Han podido desarrollarse muchos regadíos en otras zonas secas de España porque no hemos podido hacerlo aquí“, ha defendido, al tiempo que ha recordado que, por ejemplo, ”nadie le niega el agua a Madrid ni se la discute“, ha recalcado.
"El agua es de todos, pero digo yo que un poco más del lugar por donde pasa"
“¿Por qué a algunos no se les pone pegas y aquí tenemos que estar peleando cada gota de agua para beber? El agua es de todos, pero digo yo que un poco más del lugar por donde pasa”, ha añadido.
Durante su intervención, el presidente regional ha lamentado los insultos recibidos, no ya de los regantes murcianos, sino de personas de Castilla-La Mancha. “Me han llegado a llamar cateto por defender el agua para mi tierra. Y ha sido desde mi tierra, responsables políticos diciendo que de esto no había que hablar y que era de catetos. ¿Se puede tener más complejos de inferioridad?”, se ha preguntado.
Finalmente, el jefe del Ejecutivo castellanomanchego ha garantizado que “no nos faltará agua ni energía para nuestras expectativas de desarrollo” y que el agua “no será objeto de discusión, porque hemos conseguido un acuerdo bueno para la región y de ese acuerdo depende todo”.