La Diputación de Toledo ha finalizado este mes de octubre el proceso de modernización y actualización del servicio de recogida de residuos sólidos urbanos en la provincia de Toledo tras concluir la implantación del sistema de carga lateral en los 192 municipios donde prestan servicio el Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales de Toledo y la empresa Gestión Medioambiental de Toledo (GESMAT).
Con la instalación de los contendores específicos en la localidad de La Nava de Ricomalillo, hace unos días, se ha completado el proyecto iniciado en la localidad de Illescas en 2008 para dotar a toda la provincia de Toledo de un sistema de recogida más rápido, limpio y seguro como es la recogida de residuos a través del método de carga lateral.
Este proceso ha implicado la instalación de casi 11.000 contenedores de carga lateral con una capacidad de 2.400 litros cada uno, así como la incorporación al servicio de nuevos vehículos especialmente diseñados para este sistema específico de recogida de residuos sólidos urbanos.
El proyecto ha supuesto una inversión total que supera los 18 millones de euros y se ha llevado a cabo sin ningún tipo de sobrecoste para los municipios donde se presta el servicio de recogida de residuos.
El Gobierno de la Diputación de Toledo ha mostrado su "satisfacción" porque todas las localidades consorciadas cuenten ya con este sistema moderno, más eficiente, menos oloroso y ruidoso y que da mayor seguridad laboral a los trabajadores, así como ha resaltado "el gran trabajo" que para ello se ha realizado desde el Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales de Toledo y GESMAT.
Por su parte, el Consorcio ha querido agradecer "la comprensión y colaboración de las corporaciones locales, los técnicos y los operarios de los ayuntamientos, así como la paciencia de los vecinos y vecinas durante el tiempo que ha durado la implantación en toda la provincia y el buen hacer de los trabajadores de GESMAT".
Si las ventajas de este sistema de carga lateral son una recogida de residuos urbanos más rápida, limpia y segura, "el objetivo primordial es la reducción de la huella de carbono por el menor consumo de combustible, la menor contaminación acústica, la reducción de los olores y el aumento de la eficiencia en la recogida de residuos", recalca la Institución provincial.