Las intensas lluvias de los últimos días y los continuos desembalses, ante los altos niveles que alcanzaban distintas presas, han provocado que los caudales de ríos como el Alberche o el Tajo superen en varios puntos de la región umbrales rojos de riesgo de inundación. Este fenómeno ha sido monitorizado también por el sistema Copernicus de vigilancia satelital de la Unión Europea, que activó el pasado 12 de marzo su sistema de mapeo en territorio español.
Aunque los eventos comenzaron el pasado día 8 de marzo, Copernicus comenzó su registro días después, cuando la magnitud de la situación se comenzaba a vislumbrar en las provincias de Toledo, Guadalajara y Madrid.
Copernicus se basa en una “constelación de satélites” con distintas funciones, con los que captan información de todo tipo. En el caso de una catástrofe ambiental, como las inundaciones de estos días, la DANA de finales de octubre de 2024 o la erupción del volcán de La Palma en 2021, sirve como una “herramienta de apoyo a los equipos de emergencia”.
Así lo explica el profesor de Geografía Física, Rafael Ubaldo Gosálvez. El sistema se activó por las medidas tomadas por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que puso en marcha el Plan de Especial de Inundaciones el mismo día 8 de marzo y que seguirá activo, por lo menos, durante este fin de semana. Debido a las abundantes lluvias, explica Gosálvez, se han activado con toda probabilidad sensores activos que pueden atravesar las nubes para realizar las captaciones de datos.
En el caso concreto de estas inundaciones, la emergencia se ha denominado MSR-724. El profesor defiende que esta herramienta europea es “fundamental”, como “muchas otras” de las que dispone la Unión Europea, puesto que es accesible por cualquier ciudadano, aunque esté pensada más bien para los equipos de emergencia.
“Gracias a esta cartografía se puede elaborar planes de evacuación, evaluar los daños producidos y comprobar si la inundación puede ir a más”, explica.

La inundación en la localidad de Escalona en los documentos del sistema de observación satelital europeo Copernicus
Los mapas de la inundación en Castilla-La Mancha
En el caso de Talavera, explica que se ha inundado sobre todo zona con vegetación, unas 70 hectáreas, así como zonas agrícolas, con un total de 23 hectáreas, y también más de 30 hectáreas de bosque. Los datos de Copernicus apuntan a que en esta delimitación, que incluye el recorrido del río Alberche desde Santa Cruz de Retamar hasta la localidad de Talavera La Nueva, hay unas 30 personas “potencialmente afectadas”.
Sin embargo, varias decenas de casas debieron ser desalojadas en el caso de la urbanización de Calalberche en Santa Cruz de Retamar, mientras que se interrumpieron las clases durante un par de jornadas en la Universidad de Castilla-La Mancha y varios institutos talaveranos.
Por otro lado, en lo que se refiere a Guadalajara, los datos de Copernicus apuntan a que se ha inundado más de 120 hectáreas de zona cultivable y otras 10 de bosque, mientras que solo serían 20 las personas potencialmente afectadas por las inundaciones.
Tanto en Guadalajara como en la zona de paso del río Alberche en Toledo se enviaron avisos de emergencia para prevenir y avisar a la población de las posibles inundaciones.
En total, el sistema de información satelital europeo señala que el área afectada por las inundaciones es de unas 327 hectáreas, 56 personas y solo una hectárea de infraestructuras construidas. Los análisis se siguen realizado al cerrar esta información en el mediodía del 14 de marzo.