“Ha sido brutal”, aseguran las trabajadoras de la gasolinera Repsol en el polígono industrial de Toledo. “No han parado de venir en toda la semana, ha sido un continuo”, aseguran. “Nadie dice que vienen por el fin del descuento, pero se sabe”, resaltan. Las colas eran fluidas, pero también continuas. En la gasolinera “más barata” de Toledo, Noemí tiene que ayudar a dirigir los coches para que no haya incidentes. “Ha sido así toda la semana y hoy más aún”, asegura.
Así se presenta el panorama sólo un día antes de que se acabe el descuento de 20 céntimos por litro que ha promovido el Gobierno de España en los últimos meses, debido a la subida del precio de carburantes.
A esta pequeña gasolinera en el polígono industrial llegan tres camiones de descarga todas las semanas y este viernes se ha adelantado incluso un par de horas. Las personas usuarias coinciden en que vienen por el fin del descuento, “pero también porque pilla de paso”. “La gasolinera siempre está llena, porque somos los más baratos de Toledo”, explica la trabajadora.