La proliferación de explotaciones porcinas en la provincia de Toledo continúa con un nuevo proyecto que ha salido esta semana a información pública. En este caso se trata de la posible instalación de dos núcleos en el municipio de Calera y Chozas, un proyecto para el que se ha abierto un período de 30 días -desde el pasado 30 de junio- para formular alegaciones.
En concreto, se trata de dos núcleos que pretenden ser una explotación de 3.456 de cerdas con producción de lechones a destete -con una producción aproximada de 95.000 lechones al año- (Torrejón Chico I) y otra de con 2.000 plazas para cerdos de cebo (Torrejón Chico II), que entrarán en la granja con unos 20 kilogramos y 71 días y se mantendrán hasta alcanzar los 100 kilos tras 125 días en la explotación.
Modificación de otra explotación en La Pueblanueva
Por otra parte, la Consejería de Desarrollo Sostenible ha otorgado la autorización ambiental integrada a una explotación porcina ubicada en La Pueblanueva para poder modificar su capacidad productiva.
En concreto, según se indica en la Resolución publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM), esta pasará de un censo de 700 cerdas reproductoras en producción mixta, con 1.762 plazas de transición de lechones y 1.248 plazas de cebo, a un censo final para 500 cerdas en producción mixta con 1.302 plazas de transición de lechones, 1.736 plazas de cebo y 2 verracos.
Para ello, será necesario modificar, adaptar y remodelar las instalaciones para reubicar los animales aunque, como señala la Resolución, no se produce ningún incremento de capacidad de la actividad, por lo que no consideran necesario realizar un procedimiento de evaluación de impacto ambiental.