Cuando María Dolores de Cospedal dejó de ser presidenta de Castilla-La Mancha, cesaron con ella los consejeros de su Ejecutivo regional, quienes tiempo después encontraron acomodo en la Administración central. Después se convirtió en ministra de Defensa y el ‘reclutamiento’ aumentó con nuevos fichajes para este departamento y sus organismos. Ahora, tras el cambio de Gobierno, y mientras Cospedal lucha por hacerse con el poder del PP en sustitución de Mariano Rajoy, se ha ido produciendo el cese progresivo de algunos de esos ex altos cargos, que han visto repetida la experiencia, mientras que otros esperan su destitución en breve y alguno más puede mantenerse en el puesto durante algún tiempo.
Agustín Conde, aunque no fue consejero del Ejecutivo castellano-manchego, es de las personas más cercanas a Cospedal y también de los primeros en perder su puesto tras la llegada de Pedro Sánchez. La ex ministra de Defensa lo acogió como secretario de Estado de Defensa después de que Conde se quedara fuera del Congreso por desplazarse su puesto en las pasadas elecciones generales. Precisamente, el motivo fue que la ex secretaria general del PP pudiera obtener su escaño en la Cámara Baja. Después fue recompensado en el Ministerio de Defensa pero ahora, no solo ha sido cesado, sino a que ha vuelto a la palestra pública por la decisión del Consejo de Europa de prohibirle de por vida el acceso a cualquier sede de la organización. El veto se extiende a otros trece antiguos parlamentarios por "vulnerar el código de conducta" del Consejo.
La comisión de Reglamento de esta institución europea señala que Conde violó "seriamente" tres códigos de conducta, en relación a los ponentes y a las comisiones de seguimiento. En dicho documento, se le acusaba de actuar en favor de Azerbaiyán dentro del caso llamado "caviar diplomacy", mientras acudía como observador a las elecciones parlamentarias y como ponente de la Comisión de Seguimiento. Pese a todo, ahora ha sido nombrado representante de la candidatura de la ex secretaria general del PP en las primarias del partido.
En el Ministerio que dirigía Cospedal ha cesado también en su puesto Arturo Romaní, subsecretario de Defensa y otrora consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha. Según las fuentes consultadas por eldiarioclm.es, Romaní ha cesado en los últimos días. Antes de este último puesto fue el artífice de las cuentas públicas del Ejecutivo del PP en Castilla-La Mancha, en una época en que los recortes sociales fueron la principal tónica de Gobierno.
Quien todavía se mantiene en el puesto es el que fuera portavoz del Ejecutivo castellano-manchego, Leandro Esteban. Es adjunto civil al Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN), es decir, un puesto de libre designación que no tiene rango de alto cargo, pero que también es posible que pierda en las diferentes líneas de sustituciones que está realizando el nuevo Ministerio de Defensa que dirige Margarita Robles. Leandro Esteban fue el portavoz del Gobierno de Cospedal en Castilla-La Mancha y también consejero de Administraciones Públicas. En este último cargo mantuvo un encendido enfrentamiento con los empleados públicos de la Junta que acabó en varios procedimientos judiciales.
Permanece igualmente en su puesto del mismo ministerio Eliseo García Velasco, subsecretario del Régimen de Interior y ex secretario general de Hacienda en Castilla-La Mancha. Aunque sí tiene un alto cargo, su situación es similar a la de Leandro Esteban en cuanto a las probabilidades de su cese. Fue el último en ser ‘reclutado’ por Cospedal para el departamento y después protagonizó una polémica judicial al reclamar el cobro de la parte correspondiente a la paga extra de 2012 que fue retirada ese año por el Gobierno del PP en la región. El Tribunal Superior de Castilla-La Mancha aseguró que no existían “fundamentos jurídicos” que justificaran esa petición y no solo se desestimó su recurso, sino que además le impuso a Gómez Velasco costas por valor de 1.500 euros.
Ceses materializados o inminentes
Fuera de la segunda línea del Gobierno central ha quedado asimismo Marcial Marín, ya cesado como secretario de Estado de Educación, una de las primeras ‘recolocaciones’ de Cospedal cuando perdió el Gobierno regional. Marín fue su consejero de Educación, uno de los cargos que más ampollas levantó en la región debido a sus decisiones. Los decretos de recortes en educación aprobados en septiembre de 2011 por su departamento fueron el pistoletazo de salida de un progresivo deterioro de la educación pública en Castilla-La Mancha. También como responsable regional de Cultura, realizó una decidida apuesta por la tauromaquia.
Otro cese inminente, según las fuentes consultadas, será el de Carmen Casero. Todavía es directora general del Trabajo Autónomo y de la Economía Social en el Ministerio que ahora dirige Magdalena Valerio. Será cesada en breve porque además cambia toda la estructura del ministerio y se crean nuevos departamentos. Y de hecho, la nueva ministra socialista tuvo el mismo puesto que el de Casero con Cospedal, en su caso con el Gobierno castellano-manchego de José María Barreda.
Al margen de los altos cargos, hay dos puestos de los antiguos consejeros castellano-manchegos cuyo cambio no parece al menos inminente. María Luisa Soriano fue consejera de Agricultura en esta comunidad autónoma y ahora es responsable de Educación y Cultura de la Embajada de España en Roma, dependiente del Ministerio de Educación. Estos puestos los designa directamente el embajador, y en principio no se contemplan cambios en el cuerpo diplomático.
Tampoco Mar España será cesada en breve como directora de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD). La que fuera viceconsejera de Presidencia y Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha (número dos de Leandro Esteban) fue elegida en 2015 por el Consejo de Ministros por un periodo de cuatro años. Este cargo en la AEPD se relaciona con el Gobierno a través del Ministerio de Justicia y es previsible que pueda cambiar en 2019.
El último de los miembros del Gobierno del PP en esta comunidad autónoma es José Ignacio Echániz y es el caso más diferente. Después de cesar en su puesto como consejero castellano-manchego de Sanidad y Bienestar Social, regresó como diputado nacional al Congreso y ha marcado distancias con Cospedal hasta el punto de que, tras abrirse el proceso de primarias por el relevo de Rajoy, ha mostrado su apoyo público Pablo Casado, uno de los rivales de la ex ministra de Defensa.