Los trabajadores de las plantas de ‘Hermi-Carne de conejo’ de Torrijos (Toledo) y Alborelle (Sada, La Coruña), se han desplazado hoy hasta Cistérniga (Valladolid), donde su empresa tiene su sede central, para expresar su protesta por la decisión del holding cárnico de cerrar ambos centros de trabajo y despedir a las dos plantillas, 41 personas en total.
Los manifestantes, con sendas pancartas en castellano y gallego pidiendo “No al cierre de Torrijos”, “Non o peche de Hermi, en defensa dos postos de traballo”, se han concentrado durante dos horas ante las puertas de su empresa, con un frío polar, bajo la lluvia, la nieve y la aguanieve. Comisiones Obreras asegura que no consiguieron que "algún directivo de Hermi se dignara a recibirles y escucharles". El sindicato ha ido a apoyar a los manifestantes desde sus federaciones de Galicia, Castilla y León y Castilla-La Mancha.
Hermi cierra el próximo martes la negociación de los EREs con los que pretende despedir a los 21 trabajadores de Torrijos y los 20 de Sada. Será la sexta y última reunión, poque la empresa se ha negado tanto a convocar otra el lunes como a prolongar el periodo de negociaciones.
Ángel Mora, secretario general de CCOO Industria de Toledo, recordó que “ni estamos de acuerdo con las razones organizativas y técnicas que alega la empresa para los cierres, aprovechando las facilidades de la reforma laboral del PP; ni mucho menos con las condiciones en las que quiere despedir a los trabajadores". En este sentido, concluyó que "o mucho cambia la propuesta con la que venga la empresa a la reunión del próximo martes, o el ERE no llevará nuestra firma".